jueves, 21 de mayo de 2009

PSICOLOGÍA DE LA INCERTIDUMBRE


EL ESCÁNDALO DE LA PREDICCIÓN

Nassim Nicolás Taleb escribió un libro, sobre el impacto que provoca lo altamente improbable en materia económica y específicamente en inversiones bursátiles. Tiene un capítulo que se llama "El escándalo de la predicción" y como la économia contrariamente a lo que se piensa no es una ciencia exacta sino humana, me voy a permitir extrapolarla al área que más desarrollo en mi consultorio: "La pareja".
Taleb para ser ilustrativo en su explicación de los sucesos, utiliza una metáfora de países. Uno de ellos es Mediocristán y el otro es Extremistán. Su teoría fundamentalmente es que pensamos que vivimos en Mediocristán y que por lo tanto las cosas son de alguna manera previsibles y podemos hablar de que los cisnes son blancos porque la mayoría de los cisnes que nos encontramos tiene ese color; mientras que en "realidad" vivimos en Extremistán y lo altamente improbable, el cisne negro, es más habitual de lo que se piensa.
En ese orden de ideas, dice que en Mediocristán, la esperanza de vida es de un azar moderado. Se calcula en las tablas de las compañías de seguro de un país desarrollado que una niña recién nacida sana tiene una esperanza de vida promedio de 79 años.
Ahora bien, la tabla continúa de la siguiente manera, a medida que la edad aumenta, las probabilidades de sobrevida disminuyen.
Ej: A los 79 si está sana se le otorga una probabilidad de 10 años más, pero si llega a los 90 años tendrá una probabilidad de 4,7 años de vida. A los 100 años tendrá una probabilidad de 2,5 años de gracia, y si llegase milagrosamente a los 119, sólo le restarían nueve meses de vida.
Claro esto es en variables biológicas, pero en los proyectos, empresas y conductas humanas nos encontramos en Extremistán con variables escalables. Ej: una obra de construcción con un plazo determinado de entrega, si al final de ese plazo no está la obra terminada se tendrá una expectativa de 25 días más, pero si llega esa fecha y aún no se terminó habrá que esperar 58 días más y aún así si para su cumplimiento tampoco 89 días más, etc. (en algún capítulo da el ejemplo de la demora del Ópera House de Sidney en cuanto al tiempo, costo y modificación de diseño)
Dice que con las guerras sucede lo mismo, el conflicto árabe-israelí se consideró un problema sencillo y lleva ya 60 años y seguirán contando.
Luego da un ejemplo de la espera de una carta ansiada. Y aquí empalmo con el tema que quiero desarrollar.
Una consultante que mantuvo una relación por más de trece años entra en un conflicto con su pareja, y durante casi dos meses no sabe nada de su pareja. Ella temía que esta separación fuera definitiva, obviamente la discusión, la chispa fue una tarde, pero el proceso llevaba casi un año. Una serie de hechos y acontecimientos la sumían en desconcierto, amargura, vacío e insatisfacción no obstante sentir que quería a la otra persona, la seguía admirando y deseando. Pero algo en la cualidad de la relación había cambiado como para no reconocerse. Eso la hacía sentirse confundida, y sus conductas empezaban a responder más a fantasmas que a realidades, en sus propias palabras: sentía que esa modalidad de relación la desquiciaba y estaba muy lejos de la felicidad de otros tiempos.

Como en todas las relaciones estructuradas a lo largo de los años, la identidad se encuentra muy comprometida. Y en todos los posibles finales comienzan las oscilaciones. Balanceo que va de la aproximación a la evitación.
En la fase de evitación las partes fantasean con la hipótesis de vida sin el otro, sus efectos y consecuencias. Cuando ven, sienten que ese lugar es muy dificultoso vuelven. Ahora bien se vuelve fundamentalmente para resignificar el pasado, luego se verá si hay o no futuro, la pregunta más común de esta etapa es: ¿Entonces él/ella me quiso? seguidas por las otras preguntas sustentadoras: ¿cuánto me quería? ¿quién soy? ¿cuánto valgo?
Se pasa a la fase de aproximación, y esta es la fase más decisiva, porque es la que se convierte en estereotipo de los últimos días, la que intenta ser reivindicatoria de límites y fronteras del yo de las partes.
Si ambos en ese reencuentro, no hallan -aunque sea- una parte de lo que buscan en la relación. Malo, malo. El pronóstico es reservado.

Retomando el caso, cada martes cuando concurría a su sesión me informaba que efectivamente, no sabía nada de él y que su humor era muy cambiante en función del caudal de sus pensamientos. Por momentos pensaba que la separación era lo mejor que podía sucederles a ambos, en otros, no se podía imaginar la vida sin él. De todas formas, ella empezaba a sentir que sus más negros pensamiento tenían un basamento real: él ya no la quería. Dado que él no había hecho ningún intento de aproximación (entendido esto por lo que nos pasa me importa), ni siquiera la había llamado para su cumpleaños. Y ella, "parecía" tener cada vez menos ganas de llamar, el silencio de la separación no tiene ecos positivos.

El ejemplo del libro de marras "la carta ansiada" (o de la llamada ansiada) es que se suponía que iba a llegar en dos semanas. Si han pasado tres semanas y el buzón sigue vacío, no esperemos en el país de Extremistán que la carta llegue al día siguiente, como promedio tardará unas tres semanas más. Si tres meses después aún no ha llegado, tendremos que esperar otro año. Y así -dice Taleb- cada día nos acerca más a la muerte, pero nos aleja de la recepción de la carta -y agrega- esta propiedad de aleatoriedad escalable, sutil pero trascendental en extremo, es inusulmente contraintuitiva: interpretamos mal la lógica de las grandes derivaciones de la norma.

La última semana llegó mi consultante y me dice que ella lo llamó.
- Yo sabía que esta conversación iba a suceder... -respondió él-
-¿Porqué sabías?
-Por que te conozco y me conozco... (igual que decir que la guerra es una cuestión de días.)


Dice el libro...Las proyecciones de las empresas y de los gobiernos (yo agrego y de las parejas) tienen un fallo adicional fácil de detectar: no adjuntan a sus escenarios un índice de error posible.
Si no que lo digan tantas y tantas parejas que entran en la escalada y la llamada o el mail o el encuentro entra en una espiral de postergaciones, no hay que olvidar que en las parejas las posiciones se polarizan y eso se parece muchísimo al país de Extremistán.
Me dirán que el ejemplo, le da la razón al país de Mediocristán. No, no es tan así. Yo dejé para contarles para el final, el dato más importante y definitorio: que mi consultante había leído el libro, y el cisne negro aunque improbable, lo vió posible.





1 comentario:

Mate dijo...

Buenissimo Ali...y muy hummannooo, besos y gracias! Mate

Libros que inspiran este blog

  • Actos de significado. Jerome Bruner
  • Actos del lenguaje. Rafel Echeverría
  • Coaching. El arte de soplar brasas. Leonardo Wolk
  • Coaching. El arte de soplar las brasas en acción. Leonardo Wolk
  • Cultura escrita y oralidad. David R. Olson y otros (comp)
  • El buho de Minerva. Rafael Echeverría
  • El orden del discurso. Michel Foucault
  • El sí-mismo en proceso. Vittorio Guidano
  • El tao de la física. Fritjof Capra
  • El yo saturado. Kenneth J. Gergen
  • Estudios y diálogos sobre la identidad personal. Giampiero Arciero
  • Fuentes del Yo. Charles Taylor
  • Heidegger y la cuestión del Tiempo. Francoise Dastur
  • Hermenéutica del sujeto. Michel Foucault
  • Historia y Narratividad. Paul Ricoeur
  • La construcción social de la realidad. Berger y Luckmann
  • La educación puerta de la cultura. Jerome Bruner
  • La mente narrativa. Juan Balbi
  • la quinta disciplina en la práctica. Peter Senge y otros
  • La quinta disciplina. Peter Senge y otros
  • La terapia como construccion social. Seila McNamee y otro
  • Los anormales. Michel Foulcault
  • Narrativas contadas, Narraciones vividas. Ricardo Ramos
  • Ontología del lenguaje. Rafael Echeverría
  • Pasos para una ecología de la mente. Gregory Bateson
  • Por la senda del pensar ontológico. Rafael Echeverría
  • Realidad mental y Mundos posibles. Jerome Bruner
  • Realidades conversacionales. John Shotter
  • Signo: Humberto Eco
  • Soñar la realidad. Lynn Segal
  • Teoría de la comunicación humana. Watzlawick y otros
  • Wittgenstein: Mundo y Lenguaje. Prades Celma y otro